Esta playa de arenas blancas y aguas color esmeralda es parte de una pequeña y muy bonita península ubicada 15 kilómetros al sur de Coquimbo. Lo más recomendable es visitarla durante la mañana o en algún día hábil de la semana, ya que por las tardes y los fines de semana, sobre todo en período de vacaciones, se llena de gente que se instala con todo tipo de carpas.
Para llegar hay que pagar un estacionamiento de 1.000 pesos, a menos que aloje en el Tiki-Tano, una muy buena alternativa para disfrutar en pareja. Son cabañas matrimoniales, ubicadas en la misma península y pegadas al mar, con acceso a una pequeña y exclusiva bahía, a la que sólo pueden ingresar los que ahí alojan o aquellos que han almorzado en su pequeño restaurante especializado en platos marinos.La playa tiene olas para principiantes y surfistas avanzados, en ambos costados de la península. Presenta derechas y también tubos. Con fondo de arena, en Totoralillo las olas pueden alcanzar los cuatro metros de altura cuando hay marejadas. En Totoralillo también hay escuelas de surf para quienes quieran aprender a subirse sobre la tabla.
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